Incremento Salarial en Bolivia: Gobierno y COB Acuerdan 10% de Aumento al Salario Mínimo en Medio de Críticas Empresariales

En un escenario económico marcado por desafíos estructurales, el Gobierno boliviano y la Central Obrera Boliviana (COB) han acordado un incremento salarial que dinamizará la economía según autoridades, pero que genera preocupación en el sector empresarial. El salario mínimo nacional pasará de Bs 2.500 a Bs 2.750, representando un aumento del 10%, mientras que el haber básico para sectores estratégicos como educación, salud, Fuerzas Armadas y Policía se incrementará en un 5%. Este acuerdo, que busca equilibrar el bienestar social con la estabilidad económica, se produce en un contexto de tensiones inflacionarias y preocupaciones por parte del sector privado.
El Acuerdo Alcanzado: Detalles e Implicaciones
El presidente Luis Arce anunció oficialmente este lunes el incremento salarial para la gestión 2025, tras una reunión sostenida con representantes de la Central Obrera Boliviana en la Casa Grande del Pueblo. El nuevo salario mínimo nacional será de Bs 2.750, lo que representa un aumento del 10% respecto a los Bs 2.500 que regían anteriormente[2]. Adicionalmente, se determinó un incremento de hasta 5% al haber básico, que será aplicado específicamente a los sectores de Educación, Salud, Policía y Fuerzas Armadas, según informó el ministro de Economía, Marcelo Montenegro[2].
Este acuerdo muestra una continuidad en la política salarial del gobierno actual. Vale recordar que para la gestión 2024, el incremento al salario mínimo fue de 5,85%, pasando de Bs 2.362 a Bs 2.500[1]. El aumento actual representa casi el doble del porcentaje anterior, lo que refleja un cambio en la estrategia económica gubernamental.
El presidente Arce justificó la medida señalando que "este incremento permitirá mejorar el ingreso de las familias bolivianas, lo que a su vez impulsará el consumo y bienestar"[3]. Asimismo, subrayó que se ha cuidado que esta decisión no afecte negativamente al Tesoro General de la Nación, buscando un equilibrio entre dinamizar la economía y mantener la salud fiscal[3].
Posiciones Encontradas: De la Demanda Inicial al Acuerdo Final
La decisión final sobre el incremento salarial estuvo precedida por intensas negociaciones. Inicialmente, la COB había solicitado un aumento del 15% al salario mínimo y del 20% al haber básico, cifras sustancialmente mayores a las finalmente acordadas[2]. Esta diferencia entre la demanda inicial y el resultado final evidencia el proceso de negociación y concertación que caracteriza la definición de la política salarial en Bolivia.
Según los representantes sindicales, el acuerdo se basó en criterios técnicos, estadísticas oficiales del INE y el análisis del costo de la canasta familiar. Cabe destacar que, según el Instituto Nacional de Estadística, la canasta básica boliviana es aproximadamente un 30% más barata que el promedio regional[5], dato que probablemente haya influido en las negociaciones.
La Postura Empresarial: Advertencias y Preocupaciones
El sector empresarial boliviano ha manifestado reiteradamente su preocupación por el impacto que podría tener un incremento salarial significativo en la actual coyuntura económica. La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), a través de su presidente Giovanni Ortuño, había advertido previamente sobre los "devastadores efectos" que tendría un aumento salarial "excesivo e imprudente" sobre la inflación, el desempleo y la supervivencia de miles de empresas[4].
"El gobierno, la COB y los actores económicos deben entender que estamos en un escenario de extrema gravedad para la economía, en el que una medida inadecuada o inoportuna puede desencadenar el descontrol inflacionario, el desabastecimiento y el desempleo masivo", había señalado Ortuño[4].
La entidad empresarial había solicitado formalmente una reunión con el presidente Luis Arce para presentar su posición y propuestas alternativas, pero según indicaron, no recibieron respuesta a esta solicitud[4]. Esta situación refleja la tensión que existe entre los diferentes actores sociales y económicos en torno a la política salarial.
Contexto Económico: Inflación y Poder Adquisitivo
Un elemento crítico en el debate sobre el incremento salarial es su coincidencia con el aumento del precio del pan en el eje central del país, anunciado el mismo día del acuerdo salarial[3]. Este hecho ha generado preocupaciones sobre una posible reacción en cadena que afecte a otros productos de la canasta básica.
Ante esta situación, el Gobierno ha exhortado a las autoridades municipales a ejercer mayor control sobre los precios en los mercados, con el objetivo de defender el poder adquisitivo de la población[3]. Esta petición refleja la preocupación gubernamental por el impacto que podrían tener los incrementos de precios en la efectividad de la política salarial implementada.
Análisis de las Implicaciones Económicas
El incremento salarial anunciado representa un intento de equilibrar múltiples objetivos: mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, dinamizar el consumo interno y mantener la estabilidad macroeconómica. Sin embargo, este equilibrio es particularmente difícil en el actual contexto económico boliviano, caracterizado por desafíos como la escasez de dólares, problemas de liquidez y presiones inflacionarias.
Los empresarios han señalado que un aumento salarial puede tener un efecto multiplicador negativo en toda la economía, especialmente en un momento de vulnerabilidad como el actual[4]. Argumentan que podría generar un círculo vicioso de aumentos de precios, reducción de la competitividad y, eventualmente, mayor desempleo.
Por otro lado, el gobierno y la COB sostienen que el incremento es necesario para preservar el poder adquisitivo de los trabajadores y estimular la demanda interna. Esta perspectiva se basa en la premisa de que un mayor ingreso en los hogares se traducirá en mayor consumo, lo que a su vez impulsará la actividad económica.
Perspectivas y Desafíos Futuros
El recién anunciado incremento salarial plantea tanto oportunidades como desafíos para la economía boliviana. Su efectividad dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para controlar la inflación y garantizar que el aumento en los ingresos se traduzca en un mayor poder adquisitivo real para los trabajadores.
Asimismo, será crucial observar cómo responde el sector privado a esta medida. La capacidad de las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, para absorber el incremento sin reducir su planta laboral o aumentar significativamente sus precios, determinará en gran parte el impacto neto de la política salarial en la economía.
En definitiva, el acuerdo salarial para 2025 representa un compromiso entre diferentes visiones económicas y sociales. Su éxito dependerá de la implementación de políticas complementarias que fomenten la productividad, controlen la inflación y promuevan un entorno favorable para la inversión y la generación de empleo de calidad, estableciendo así las bases para un crecimiento económico sostenible e inclusivo en Bolivia.
Fuentes
[1] [PDF] El Salario Mínimo Nacional sube a Bs2.500 para dinamizar la ... https://www.economiayfinanzas.gob.bo/sites/default/files/2025-01/BITACORA-33.pdf
[2] Salario mínimo sube de Bs 2.500 a Bs 2.750 tras acuerdo entre ... https://correodelsur.com/economia/20250428/salario-minimo-sube-de-bs-2-500-a-bs-2-750-tras-acuerdo-entre-gobierno-y-cob.html
[3] Gobierno y COB acuerdan incremento salarial: 10% al mínimo ... https://www.reduno.com.bo/economia/gobierno-y-cob-acuerdan-incremento-salarial-10-al-minimo-nacional-y-5-al-haber-basico-202542814330
[4] EMPRESARIOS REITERAN ADVERTENCIA SOBRE EL AUMENTO ... https://www.cepb.org.bo/notas-de-prensa/empresarios-reiteran-advertencia-sobre-el-aumento-salarial-y-siguen-esperando-la-convocatoria-del-gobierno/
[5] Según el INE, la canasta básica boliviana es en promedio 30% más ... https://la-razon.com/economia/2025/01/23/segun-el-ine-la-canasta-basica-boliviana-es-en-promedio-30-mas-barata-en-la-region/